MADNESS IN MY MIND

MADNESS IN MY MIND
by Joseph Epitie

domingo, 1 de mayo de 2011

Mi religión favorita

Fue como suecede con casi todas las conversaciones profundas... empiezan con algo normal, una visión de una imágen o simplemente tras un silencio largo, a veces incómodo o no. Llegó la pregunta de ¿Eres religioso?, ¿Crees en Dios?. Tu, respondes si, no, depende, bueno... Pero el que te pregunta (a veces testigos de Yehová que te asaltan en la calle o sencillamente un amigo que quiere conocerte mejor o sencillamente un ateo que quiere arrinconarte con un dilema religioso y quebrantar tu fe) quiere profundizar en tus convicciones religiosas. No contento con la respuesta quiere saber más, el porqué y que demuestres en todo aquello que tienes por seguro pero... ¿Cómo demostrar la existencia de Dios?, El aire afecta a las cosas, lo sientes en tu cara pero... ¿Puedes capturar un puñado de aire con tu mano?, ¿lo has visto?.
Por lo general la respuesta mas vista ante esta "encerrona" es una leve sonrisa. Mientras el que te pone en un aprieto se regocija ante la imposibilidad de que demuestres que en lo que crees es real. Te toman por un niño creyendo en los Reyes Magos.

En lo que me aconteció hoy, resulta que estaba quien esto escribe en la barra del bar, haciendo como que no oye la conversación, mirando a uno y otro lado, hasta que los que hablaban divertidos y de sopetón me sueltan "¿Y tu, crees en Dios?". Yo respondí con una sonrisa en la cara y "si, creo en Dios, pero no precisamente en un ente antropomórfico de barbas blancas que está ahi despues de morir con una sonrisa de bonachón para darnos un abrazo en el Paraiso", la respuesta le gustó tanto a aquel que se me correspondió con una sonrisa mayor si cabe, e incluso me dió la mano y se presentó. Si, parece una respuesta larga, rebuscada pero... me salió del alma. He sido bautizado, he hecho la comunion y... (si, puntos suspensivos). ¿Qué hacer con la religión?, porque ese rito lo conocemos todos, por lo menos en el mundo cristiano en que vivo enrolado, se nace y se te presenta a Dios y a la sociedad cristiana con el Bautismo. Luego llega la Comunión, en que renuevas y haces promesa de ser fiel a Dios, la Confirmación, Penitencia, Eucaristia...

Desde pequeño nos han enseñado que existe el Cielo e Infierno. Que si hacemos buenas acciones tenemos el cielo ganado. Yo me preguntaba por esas pobres criaturas que mueren nada mas nacer o esos niños que no tienen la oportunidad de ser bautizados o viven en otras religiones... ¿estarían equivocados ellos?, ¿nosotros?, ¿Es un Dios para todos o está disfrazado de más dioses?. Las dudas me hacian vivir en un estado de "pavor", ese miedo a lo Divino que te compungía y te hacia ir con un cierto miedo o respeto desmesurado cuando ibas a misa, a confesarte asustado de que te excomulguen o te castiguen en demasia o peor: ir al infierno. Ahora con el tiempo pienso en lo mal y angustiados que lo debieron pasar en tiempos pasados, cuando la Iglesia casi era el segundo poder tras el rey y el miedo a Dios, la ignorancia general y la magia eran el pan nuestro de cada dia.

Hace tiempo que perdí la fe en mi Iglesia. No por toda la prensa que la pinta fatal sino porque ya no respondían a mis preguntas mas profundas. Esa búsqueda de Dios que debe ser toda religión, el aprender a vivir en la vida terrenal pues al fín y al cabo... estamos a dia de hoy aquí, y si despreciamos completamente esta vida solo por preocuparnos por la siguiente es mucho tiempo perdido. Dejé la religión de siempre atrás pues ya dejó de serme útil. Veo cada día que voy a misa gente sentarse, levantarse, arrodillarse, sentarse, levantarse, desfilar, hacer ese "brubrubrubrubru" que por mucho que me esfuerce nunca comprenderé que están diciendo y luego pasar el cepillo e irse para casa. Ese rito crstalizado desde hacía tiempo. El predicar cada dia por la vida despues de la muerte sencillamente me parece algo pasado, aburrido, el munddo de hoy en dia necesita que alguien lo apoye y le de esperanzas y enseñe un modo de vida, veo cada dia personas que van sin rumbo fijo por la vida sin saber que rumbo tomar, nadie les enseña a vivir en este mundo. Deberíamos centrarnos en aprender a vivir en este, este mundo, que a fin de cuentas es en el que estaremos mucho tiempo, creo que es algo importante.